Kristyan Licea, es una mujer exponente de la gran belleza del occidente de México, de la tierra de Michoacán; esta hermosa mujer, de ojos brillantes, de cuerpo voluptuoso, que gusta le reconozcan como muchas mexicanas, por ser una fémina de lucha y de trabajo.

Mencionó que las michoacanas y en general las mexicanas, son mujeres muy hermosas que se caracterizan en luchar por sus ideales, ser trabajadoras, emprendedoras. “En el caso especificó de mis paisanas, puede decir que somos cálidas, apasionadas, de armas tomar y nuestra verdadera belleza surge de ser la humildad y sencillez”.

Al cuestionarla sobre su sentir de robar las miradas de los hombres en todo momento y lugar, sonríe y no puede dejar de reír un poco, pues acepta que le pasa continuamente, ya sea en las calles o restaurantes se da cuenta cuando los hombre voltean a verla, aunque a veces ha sido un poco incómodo, pues no ha faltado a que alguien va acompañado y al girar su mirada se han ganado el regaño de la novia o la esposa.

Su bello cuerpo que ha cultivado con dietas y ejercicio, como diversos cuidados de la piel, etc., se ha contorneado y vuelto el centro de la mirada de los hombres y acepta que sus piernas son su mayor atractivo, cosa que cataloga no fue fácil, pues de adolescente “tenía popotitos”, pero con los alimentos adecuados como actividad física he logrado mi figura”.

Ríe y sin comprometerse a decir que es aquello que más le observan los hombres, bromea e indica que la parte de su figura más escaneada por los masculinos es “cosa de cada uno, pero imaginó que la gran mayoría diría que mis glúteos”.

Esta mujer de amplia sonrisa, que gusta de la playa y de vivir intensamente las cosas, explica que se siente orgullosa de sus orígenes, que sus padres le enseñaron que siempre se debe trabajar y ser respetuosa, agrega que desde pequeña y ahora como adulta le gusta de hacer amigos, de siempre mostrar una sonrisa a todos aquellos que la rodean.

Su carácter alegre le permiten ser muy sociable y amigable con la cámara de fotografía, actitud esencial en su profesión del modelaje, que comenzó a ejercer en la región de Tacambaro, cuando le invitaron a modelar trajes de una boutique, y tras dialogar con los encargados de dicho trabajo, pudo incursionar un poco más en dicha profesión; de esta forma, poco a poco comenzó a adentrarse en dicha carrera.

La chica de figura radiante y grandes curvas acepta que al principio el modelaje como un pasatiempos y al paso del tiempo se enamoró de cada proyecto que fue saliendo uno tras otro. “Las cámaras me gustaron, las pasarelas, las imágenes, etc., y en especial las personas que están inmiscuidas en este sector son muy profesionales y comprometidas con su trabajo y te brindan grandes atenciones”.

Al averiguar, quién era Kristyan, antes de ser la “modelo”, declara que “estudié cultura de belleza, ejercía ese trabajo pero no era muy de mi agradó, y tras ir poco a poco probando las cámaras y el ser imagen de algunas marcas me convencí que ejercería esta carrera, sin embargo, esta profesión no es eterna y ahora me estoy preparando en aspectos muy definidos de dermocosmetología -aspectos de salud de la piel-, que tiene muchas ramas para ser explotadas, como son los masajes corporales, cuidado de la epidermis y tratamientos postcirugía.

No deja de remarcar de manera muy formal que todas las mujeres somos hermosas, y el físico no es algo eterno, y lo más importante es ser una misma, cultivar nuestro intelecto. No hay nada como estudiar, prepararse y ser constantes, las michoacanas como las mexicanas en general somos muy disciplinadas y nunca nos rendimos”.

Sin querer entrar en polémicas con sus colegas, abunda que cada mujer que se dedica al modelaje tiene sus propias características, que son de admirar y que les brinda la posibilidad de brillar de forma única. “Dicha realidad hace que todas seamos originales y estemos agradecidas de poder trabajar y cumplir nuestras metas”.

Expresa que le gusta mucho los comentarios espontáneos, y que los piropos le son de su agradó, siempre que no sean vulgares o faltos de respeto.

Ya en dicho tenor y tratando a averiguar cómo se encuentran los sentimientos de esta mujer o sobre que necesitan los hombres al buscar conquistar su corazón de esta chica de ojos brillantes y bellos, sonríe escuetamente y enfatiza que “los hombres deben cumplir con varios requisitos indispensables, como ser respetuosos, pacientes y comprensivos con su carácter.

Finalmente, explicó que la pandemia le dejo un gran aprendizaje, el comprender que se debe vivir el día a día como si fuese el último y siempre recibir con alegría las cosas que van sucediendo, aprender de lo complicado y no dejar de trabajar para alcanzar las metas de la vida. Invitó a que quienes gusten seguirla en sus redes sociales como Instagram: @kristyanlicea, y en Facebook: kristyanlicea.

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