En años recientes México se ha posicionado como un territorio próspero para el nacimiento y desarrollo de startups, claros ejemplos de ello son Kavak, Bitso y, recientemente, Clip. No obstante, aún enfrentan diversos desafíos, sobre todo en materia legal, que de superarse podrían convertir al país en un semillero de empresas valuadas en más de mil millones de dólares, conocidas como empresas unicornios.

De acuerdo con Víctor Aguirre López, socio fundador de la firma BlackBox Startup Law, despacho legal especializado en startups, la pandemia tuvo un rol clave para el crecimiento de estas empresas en México. Esto debido a, por un lado, la adopción de nuevos productos y servicios digitales les ayudó a sumar usuarios, y, por el otro, importantes fondos de inversión han decidido apostarles a proyectos de startups nacionales.

“A pesar de que las recientes reformas, como la relacionada a la subcontratación laboral, están sentando las bases para el crecimiento de las startups en el país al dar certidumbre a los inversionistas, también es necesario implementar un marco regulatorio que simplifique la gran carga tributaria que implica para un emprendedor echar a andar su proyecto”, señaló.

México es el segundo país más próspero de América Latina para el desarrollo de startups y está entre los primeros 5 de Iberoamérica, de acuerdo con el reporte The GovTec Index 2020, elaborado por CAF Banco de desarrollo de América Latina y Oxford Insights, el cual considera tres variables de referencia: startups digitales, políticas gubernamentales y sistema de adquisiciones.

El documento mencionado sugiere además que las ciudades más digitalizadas tienen una capacidad mayor para aprovechar las nuevas tendencias y, con ello, detonar el nacimiento de nuevas startups y el crecimiento de las existentes. El documento señala que Buenos Aires, Ciudad de México y São Paulo son las tres urbes con mayor potencial de desarrollo para el ecosistema startup en América Latina.

En palabras de Víctor Aguirre, el éxito de una startup está determinado en gran medida por el tiempo y dedicación que los emprendedores tengan para desarrollar su empresa.  Por ello, es esencial contar con especialistas y marcos regulatorios simplificados que les ayuden a enfocar sus esfuerzos y recursos en hacer crecer su negocio.

Así, aunque el panorama para las startups en México luce prometedor, se deben superar desafíos importantes. El especialista de BlackBox destaca tres principales:

Ajustes en la tributación. Para impulsar el desarrollo de las startups es fundamental transitar a esquemas de impuestos más flexibles, sobre todo durante el primer año de vida de la compañía, que permitan cimentar las bases adecuadas para una compañía sólida.

Nuevos esquemas para la seguridad social. El abogado de BlackBox también propone esquemas especializados de seguridad social para startups y emprendedores, ya que este aspecto representa un gran reto para los nuevos negocios, especialmente en lo referente a trámites y costos.

Trámites sencillos y accesibles para la creación de nuevas empresas. El costo notarial de crear una empresa en México es sumamente alto. En promedio es cinco veces más alto que en Estados Unidos, lo cual se convierte en una importante limitante para que los emprendedores puedan poner en marcha su proyecto.

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